Desde que encontramos formas de contar historias, el storytelling ha hecho parte de la raíz de cada cultura, partiendo de las pinturas rupestres hasta lograr compartir nuestros relatos, de generación en generación, por medio de la narración oral.
Con la continua evolución de la humanidad y sus formas de comunicación, hoy contamos con innumerables maneras para compartir, desarrollar y crear historias, no solo para dar a conocer nuestros orígenes, sino por propósitos tan simples como generar emociones u otros más complejos como dar a conocer una marca.
El papel del storyelling en la publicidad tomó aún más prioridad cuando, en medio de la saturación publicitaria, que llegó a aburrir y agotar a la audiencia, nos dimos cuenta de que teníamos que ir un paso más allá de solo hablar de nuestros productos y/o servicios. Debíamos lograr entender al cliente y, con ese punto de partida, transmitir los valores de la marca y lograr que este se identifique con la misma.
Así, el marketing dio un giro cuando se enfocó primero impactar las mentes y corazones de su público antes que sus bolsillos. Esto permitió que algunas marcas empezaran a destacarse sobre su competencia, porque en cierta forma brindaban la sensación de novedad, incluso si era por un breve periodo de tiempo.
Aunque el storytelling se convirtió en un mecanismo primordial en la ejecución y conceptualización de las estrategias, hemos llegado a un momento en el que esta perdiendo su fuerza. Nuevamente, nos encontrarnos invadidos de cientos de campañas que usan un mismo recurso y las vemos tanto que ya no no generan el mismo impacto o sorpresa de antes.
Storydoing
Por este motivo, los ‘expertos’ del marketing digital nos han traído un nuevo concepto para que vayamos más allá. Ya no podemos limitarnos a contarle historias a nuestro público, para que tengan efecto, debemos pasar a la acción.
«Debemos generar experiencias que conviertan a la audiencia en protagonistas.»
Para poder implementar correctamente el storydoing a nuestros proyectos, según el portal Cyberclick, necesitamos saber qué queremos:
- Contar
- Provocar
- Conseguir
Con esta información, tendremos un punto de partida para aprovechar al máximo esta herramienta.
¿Por qué el storydoing puede ser bueno para tu marca?
Al hacer que el rol del publico objetivo sea más participativo, logramos que la audiencia este más cercana e involucrada con la marca. Esto va a permitir que tanto la empresa, cómo los productos o servicios que ofrecen, generen una mayor recordación.
También, el hecho de que las acciones del storydoing generen un mayor impacto, aumenta la probabilidad de que tus campañas sean mencionadas por los medios. Este tipo apariciones gratuitas, te permitirán disminuir la inversión en publicidad paga y alcanzar resultados con un menor costo.
Además, al involucrar a la audiencia de una forma mucho más directa, los contenidos del storydoing adquieren un gran potencial de ser virales, al dejar huella en las redes sociales.
Es entendible que posiblemente aún no estés completamente convencid@ de la eficacia y la importancia del storydoing como parte de tus estrategias, por eso, para que cambies de opinión, te compartimos algunos ejemplos de cómo grandes marcas lo han aprovechado:
Coca-Cola: La máquina de la amistad
BIC: ¿Qué tal si pudieras pagar por la creatividad
Red Bull: Salto Estratosférico
Starbucks: Encuéntrame en Starbucks
Recuerda, si quieres incursionar con tu marca en nuevas formas de desarrollar contenidos, solo debes contactarnos, aquí https://fenix.prestigiodigital.co/
fuente: cyberclick.es